Mitos y realidades sobre la visión: lo que necesitas saber

Detailed photo showing a brown eye with long eyelashes and eyebrow.

La visión es uno de los sentidos más importantes para interactuar con el mundo que nos rodea. Sin embargo, a lo largo de los años, han circulado muchos mitos y creencias erróneas sobre el cuidado ocular. A menudo, estas ideas incorrectas pueden generar malentendidos o prácticas inapropiadas, que incluso pueden afectar la salud visual. En este artículo, desmentimos algunos de los mitos más comunes sobre la visión y te ofrecemos la realidad detrás de ellos para que puedas tomar decisiones informadas sobre tu cuidado ocular.

Mito 1: Leer con poca luz daña la vista

Realidad: Aunque leer con poca luz puede hacer que tus ojos se cansen más rápido, no causa daños permanentes en la visión. La falta de iluminación adecuada puede aumentar la fatiga ocular y generar incomodidad, pero no provocará problemas a largo plazo en la salud de los ojos. Para evitar el cansancio visual, es recomendable tener una luz suave y dirigida hacia el material de lectura, evitando reflejos o deslumbramientos directos en los ojos.

Mito 2: Las gafas empeoran la visión con el tiempo

Realidad: Usar gafas con la prescripción correcta no empeora la visión. Las gafas están diseñadas para corregir problemas de refracción, como miopía, hipermetropía o astigmatismo, y mejorar la claridad visual. Si tus gafas ya no te ofrecen el mismo nivel de confort o visión nítida, es posible que tu prescripción haya cambiado. Es recomendable consultar con un especialista en salud visual para realizar un examen y ajustar las lentes si es necesario.

Mito 3: Las personas que tienen problemas visuales deben evitar ver televisión o usar computadoras

Realidad: No es necesario evitar ver televisión o usar dispositivos electrónicos si tienes problemas visuales. Sin embargo, el uso prolongado de pantallas puede aumentar la fatiga ocular, una condición conocida como “síndrome de visión por computadora”. Para prevenir este malestar, es importante seguir la regla 20-20-20: cada 20 minutos de uso de una pantalla, mirar algo a 20 pies de distancia durante al menos 20 segundos. Además, asegúrate de tener un ajuste adecuado de brillo y contraste en la pantalla, así como un ambiente bien iluminado.

Mito 4: El uso de lentes de contacto es más peligroso que las gafas

Realidad: El uso de lentes de contacto es seguro siempre que se sigan las indicaciones y recomendaciones del especialista. La clave para mantener una correcta higiene y evitar infecciones es asegurarse de limpiarlos adecuadamente, evitar el uso excesivo o durante la noche, y reemplazarlos según las recomendaciones del fabricante. En comparación con las gafas, los lentes de contacto pueden ofrecer más libertad y comodidad en diversas actividades, aunque algunas personas pueden necesitar un tiempo de adaptación.

Mito 5: Las zanahorias mejoran la visión

Realidad: Si bien las zanahorias son una excelente fuente de vitamina A, la cual es importante para la salud ocular, no hay evidencia que sugiera que consumirlas mejorará tu visión si no tienes deficiencia de este nutriente. Una dieta balanceada, rica en frutas y verduras, es fundamental para mantener los ojos en buen estado. Además de las zanahorias, los alimentos ricos en antioxidantes, como los arándanos y las espinacas, también son beneficiosos para la salud ocular.

Mito 6: La presbicia solo afecta a las personas mayores

Realidad: La presbicia, o la dificultad para ver de cerca, es un proceso natural relacionado con el envejecimiento, pero no necesariamente afecta solo a las personas mayores. Aunque suele aparecer alrededor de los 40 años, algunas personas pueden experimentar sus primeros síntomas antes, debido a factores como la genética o el estilo de vida. Las personas que pasan mucho tiempo leyendo o usando dispositivos electrónicos pueden notar una disminución de la capacidad de enfoque a corta distancia con el paso del tiempo.

Mito 7: El sol no tiene impacto negativo en la visión si no miras directamente a él

Realidad: El sol puede dañar la vista incluso si no estás mirando directamente a la luz solar. La exposición prolongada a los rayos ultravioleta (UV) puede causar daño a largo plazo en los ojos, aumentando el riesgo de enfermedades como cataratas y degeneración macular. Por esta razón, es recomendable usar gafas de sol que bloqueen el 100% de los rayos UVA y UVB siempre que estés al aire libre, incluso en días nublados.

Mito 8: Si no tienes problemas de visión, no necesitas revisiones regulares

Realidad: Incluso si no experimentas problemas visuales evidentes, es esencial realizarse exámenes oculares periódicos. Muchas afecciones visuales, como el glaucoma o la degeneración macular, pueden no presentar síntomas en sus primeras etapas. Un examen ocular rutinario permite detectar posibles problemas antes de que se conviertan en condiciones graves y tratar cualquier anomalía a tiempo. La frecuencia recomendada de los exámenes varía según la edad, antecedentes familiares y otros factores, pero en general, se sugiere al menos uno cada dos años.

Mito 9: El uso excesivo de dispositivos electrónicos causa ceguera permanente

Realidad: Pasar muchas horas frente a pantallas no causa ceguera permanente. Sin embargo, puede generar síntomas temporales de fatiga ocular, como sequedad, picazón, visión borrosa o dolor de cabeza. El “síndrome de visión por computadora” es común entre quienes pasan mucho tiempo frente a dispositivos, pero sus efectos no son permanentes y desaparecen con el descanso adecuado y cambios en los hábitos de uso de tecnología.

Mito 10: La cirugía láser es peligrosa y tiene muchos efectos secundarios

Realidad: La cirugía láser para la corrección de la visión es un procedimiento seguro y efectivo cuando lo realiza un profesional experimentado. Aunque como cualquier cirugía, tiene algunos riesgos, la tasa de éxito es muy alta y muchos pacientes experimentan una mejora significativa en su visión sin efectos secundarios graves. Es fundamental someterse a una evaluación detallada para determinar si eres un candidato adecuado para este tipo de cirugía.

Conclusión

La visión es un aspecto fundamental de nuestras vidas, y es crucial entender cómo cuidarla correctamente. A lo largo de los años, los mitos sobre la visión han generado desinformación, pero con información precisa y un cuidado adecuado, es posible mantener unos ojos en buen estado durante toda la vida. Recuerda siempre consultar con un especialista en caso de duda y realizarte exámenes periódicos para mantener tu vista en óptimas condiciones.